- Tal y como asegura el expresidente de SEEDO, “la obesidad debe considerarse como una enfermedad y, por lo tanto, la persona con obesidad no debe ser culpabilizada por tenerla”
- El catedrático de Medicina e investigador del IDIS asegura que “aún no conocemos la causa real que está detrás de la obesidad”
- Aunque comer menos y gastar más energía se asocien con un menor riesgo de obesidad, “no son factores que expliquen por sí solos la presencia de esta enfermedad y, por lo tanto, deben atenderse también otros aspectos”
- Un 39% de la población gallega tiene sobrepeso y un 22,5% sufre obesidad
Santiago de Compostela, 27 de noviembre.- Existe aún mucho desconocimiento sobre la obesidad, lo que unido al mantenimiento de ciertos mitos y concepciones clásicas y erróneas, desvirtúa tanto la trascendencia de esta enfermedad y su consideración como tal, así como impide una prevención y tratamiento más óptimo. Así lo considera el Prof. Felipe Casanueva, uno de los expertos españoles pioneros en el estudio y abordaje de la obesidad y que hoy es el responsable de la conferencia inaugural del XX Congreso Nacional de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO), que se celebra hasta el viernes en Santiago de Compostela.
Para el expresidente de SEEDO, “comer mucho y gastar poca energía no son factores que expliquen por sí solos la presencia de esta enfermedad y, por lo tanto, deben atenderse también otros aspectos”. Aunque se sabe sobradamente que la restricción calórica y el aumento del gasto de energía son pilares fundamentales del tratamiento de la obesidad, a juicio del Prof. Casanueva “a día de hoy seguimos sin conocer realmente LA CAUSA de la obesidad, sobre todo porque no podemos hablar de un único factor desencadenante”.
Por eso, el Dr. Albert Lecube, vicepresidente de SEEDO, reclama que “a la obesidad hay que reconocerla en toda su complejidad; de lo contrario, si se continúa asumiendo que se trata de un problema de falta de voluntad de la persona afecta y que el único tratamiento es la nutrición y la actividad fisca, estamos completamente perdidos”. Y es que, añade, “si partimos de esta idea errónea, que apunta una solución fácil, no se va a invertir lo necesario ni en prevención ni en tratamiento, ni en investigación ni en formación”.
Un futuro ‘optimista’, sin culpabilizar al paciente
Y es que, según el Prof. Casanueva, “la explicación simplista que se ha aceptado durante décadas sobre el origen y desarrollo de esta enfermedad ha dificultado enormemente un mejor abordaje”. Aunque este experto admite que “estamos viviendo una epidemia mundial de obesidad, que ancla su origen en los años 60 del siglo pasado”, se declara optimista respecto al futuro.
“Las cifras que manejamos actualmente de sobrepeso y obesidad son preocupantes, pero hay mucho margen para la mejora y se atisban luces entre tantas sombras”, asegura el investigador del IDIS y uno de los mentores e impulsores de la SEEDO, que por primera vez se celebra su congreso nacional en Santiago de Compostela.
Aparte de contarse con nuevos y potentes fármacos antiobesidad y de un creciente interés investigador y de la industria farmacéutica por esta enfermedad, “hemos logrado concienciar a la sociedad que la obesidad es mucho más que un problema estético, se trata de una enfermedad, de un problema médico de primer orden”. Además, según añade el expresidente de SEEDO, “poco a poco, estamos concienciando a las autoridades políticas y sanitarias que se debe actuar ya frente a la obesidad, desde un abordaje holístico e integral”, afirma este experto, que, ante todo, advierte sobre la “importancia de considerar la obesidad como una enfermedad crónica que, como la dislipemia o la hipertensión, precisa de un cuidado y atención durante toda la vida”. En otro orden de cosas, el Prof. Casanueva subraya la necesidad de “evitar culpabilizar a la persona con obesidad por sufrir esta enfermedad”.
Obesidad: situación en España y Galicia
La obesidad es una enfermedad crónica multifactorial y, además, es un potente factor de riesgo de desarrollo de numerosas enfermedades, entre las que se encuentra la diabetes, la enfermedad cardiovascular, enfermedad hepática, enfermedad renal, enfermedades neurodegenerativas y varios tipos de cáncer.
La información más reciente disponible sobre la prevalencia de la obesidad en España procede del estudio ENE-COVID (Gutiérrez-González E. Front Public Health. 2023) y las perspectivas futuras no resultan especialmente esperanzadoras, atendiendo a los datos de España que se incluyen en el Atlas Mundial de la Obesidad (World Obesity Atlas 2023 (https://www.worldobesityday.org).
Con todo, desde la SEEDO aportan un mensaje de optimismo, sobre todo porque “estamos consiguiendo iniciar una gran movilización de sociedades científicas y pacientes, que esperamos haga cambiar las previsiones y las cifras en nuestro país”, apunta el Dr. Lecube.
En el caso de la Comunidad Autónoma de Galicia, la prevalencia de la obesidad es alarmante, y se encuentra en un nivel comparable al resto de España. Según los datos de la última Encuesta Europea de Salud, un 39% de la población gallega tiene sobrepeso y un 22,5 % sufre obesidad, lo que significa que unos 444.000 gallegos viven con obesidad.
El 62% de la población, es decir, casi dos de cada tres gallegos mayores de 18 años tienen exceso de peso, lo que sitúa a Galicia como la segunda comunidad con el porcentaje más alto, tan solo superada muy de cerca por Extremadura, con el 62,1%. La media estatal está en torno al 56%.
Los datos de exceso de peso de los niños y adolescentes gallegos, aunque también preocupantes, son más esperanzadores porque se encuentran en un 28,4% (18,5% sobrepeso y 9,7% de obesidad); por debajo de la media nacional (30% exceso de peso en niños y adolescentes). Esta prevalencia de obesidad es mayor en hombres que en mujeres, tanto en adultos como en niños y adolescentes.